viernes, 21 de septiembre de 2012

El desencuentro sexual de las parejas

Una de las cosas que más me conmueve durante mi trabajo de educar sobre sexualidad es el desencuentro sexual entre la pareja. La mayoría de los casos me enfrento a una pareja que en sus inicios de relación y en sus inicios de convivencia podían disfrutar ampliamente de su sexualidad. Luego casi sin darse cuenta de cómo, ocurre un declive, un enfriamiento y una apatía que los invade y que parece rebelde y resistente a desaparecer.
Las razones convencionales pueden ser muchas. La rutina, la falta de tiempo, el estrés, los cambios personales, los hijos. Pero la verdad es que la razón es básicamente energética.
Tiene que ver con el ascenso de la energía sexual desde los centros inferiores hasta el centro del corazón.
La sexualidad fogosa y apasionada de los primeros tiempos de la relación de pareja tiene como función atraparlos y motivarlos a unirse y permanecer unidos para empezar juntos un proceso de transformación y evolución.
Esa intensidad de deseo sexual tiene como razón de ser el asegurar que la pareja se una y que deseen seguir unidos. Pero es solo la puerta que se abre hacia un largo corredor cuya siguiente puerta es el corazón.
Debido a la conexión energética que existe entre el centro sexual y el centro del corazón, toda experiencia sexual "abre" el corazón. 

Durante el compartir sexual, durante la excitación sexual y la experiencia de placer se abre el corazón. Es algo intenso y temporal.

Luego para mantener el corazón abierto hay que esforzarse. No se sostiene automáticamente. El sexo solo lo abre para que luego la personalidad cultive ese corazón y lo mantenga abierto.
Si nos ponemos a analizar, resulta que la convivencia es la forma más fácil de cerrar el corazón. La convivencia implica enfrentarse sin posibilidad de huida con limitaciones, temperamentos, caprichos, miedos, manías, interferencias y mucho mas. 

En realidad la convivencia es un coctel explosivo que puede llevar a perder el corazón hasta el punto que sea muy dificil encontrarlo.
Ahí es cuando comienza a sufrir la sexualidad de la pareja. 

Mientras mas cerrado el corazón por la rabia, el resentimiento, la decepción, más dormida la sexualidad.


Tan pronto se recupera un poco el respeto, la confianza y la admiración, vuelve a aparecer el deseo sexual.

Cuando la pareja discute, se agrede, se hiere y luego se siente atraída a unirse sexualmente lo que está haciendo instintivamente es tratando de reconectar con el corazón. Es la forma de tocar aunque sea un ratico el corazón abriendo el canal de energía. Solo que si no hay trabajo posterior, quedará como un sexo de reconciliación sin que produzca verdadera transformación de la pareja.

Invito a las parejas que están viviendo este proceso de desencuentro sexual a que no busquen la solución en experiencias extremas que solo despierten el deseo erótico, sino que busquen más arriba de los genitales...en el corazón...y despertarán de nuevo la chispa de atracción y excitación que conocieron antes de que la convivencia la apagara.

Pregunta un lector:
Buenísimo amiga. ¿Qué tipo de ejercicios recomendarías para reactivar esta unión a nivel del corazón?

Respuesta:
Bueno, a mi me gusta mucho el Hooponopono. Somos creadores de nuestra realidad, así que aquellas cosas difíciles que vemos en el otro tienen que ver con nosotros. La afirmación dice: Divinidad disuelve las memorias dolorosas y las creencias erróneas que crean esta realidad de miedo, desconexión, rabia o cualquiera de las emociones negativas, y luego simplemente dices Lo siento, perdóname, gracias, te amo, 3 veces. Y lo repites como un mantra cada vez que la emoción venga a ti. De esa forma comienzas a disolver el bloqueo de energía y se empieza a ver una pequeña rendija por donde puedes comenzar a abrir el corazón.

lunes, 13 de agosto de 2012

¿Y el corazón y el sexo están relacionados?




Existe la tendencia a pensar que se pueden disociar el sexo del amor, pero desde el punto de vista energético eso es imposible de hacer. Existe un canal de energía que comunica el chakra sexual con el chakra del corazón. Se dice que ese canal tiene una forma diferente de funcionamiento según la persona sea hombre o mujer.

Si es un hombre, el canal se abre por el chakra sexual. Es decir que cuando los hombres son estimulados sexualmente el chakra del corazón se abre. Este chakra durará abierto el tiempo que dure la conexión sexual a menos que haya otras condiciones que permitan que el chakra se mantenga abierto.

Si es un hombre de temperamento sentimental...si está enamorado de la persona...si ha trabajado su lado femenino y no le da miedo la vulnerabilidad...si ocurre alguna de estas condiciones o quizás todas, cuando el estímulo del chakra sexual abra el corazón éste se mantendrá abierto mientras el hombre sienta que puede confiar y el placer sexual esté presente.

La sexualidad es fundamental para que el hombre mantenga su corazón abierto.

Eso puede sonar muy controversial para nosotras las mujeres, porque tendemos a juzgar, criticar y despreciar a los hombres por su intensidad y frecuencia sexual, sin embargo, de acuerdo a su diseño energético, los hombres necesitan el sexo para mantener el corazón abierto.

Nosotras mujeres si queremos mantener viva la llama del amor del hombre hacia nosotras no debemos despreciar la importancia que tiene la sexualidad en ello.

En el caso de la mujer, el chakra sexual se abre a través del chakra del corazón. 

Para que una mujer pueda abrir su sexualidad necesita sentirse amada, necesita haber escuchado palabras de amor que sean creíbles, que le inspiren confianza, y así y solo así puede abrir totalmente su sexualidad y dar y recibir placer con plenitud.

Aquello que los hombres desprecian de las mujeres que es su emocionalidad, su sentimentalismo y su vulnerabilidad es la clave para que puedan vivir el placer sexual y la entrega con totalidad.

La sexualidad de la mujer puede ser tan simple como abrir las piernas y tener un rico orgasmo, como puede ser una experiencia mística de expansión y conexión profunda emocional y espiritual.
La sexualidad de un hombre puede ser tan simple como un "rapidito" en el ascensor, o tan profunda que le permita descubrir a Dios en los brazos de su amada.

Todo va a depender del tamaño del canal de energía que se abra entre el chakra sexual y el chakra del corazón.

Mientras más abierto esté el corazón en confianza, entrega, sin miedo y con absoluta fe, mayor será la apertura de la sexualidad y mayor será la posibilidad de experimentar la espiritualidad a través del sexo.

La recomendación es:

Hombres...permítanse abrir el corazón, ser vulnerables y entregarse a lo que sienten. Aprendan la importancia que tienen las palabras de amor genuinas para la mujer.

Mujeres...permítanse una conexión sana y plena con la sexualidad, entréguense al placer con el corazón abierto. Aprendan la importancia que el sexo tiene para los hombres.

Honrémonos unos a otros para poder descubrir todo el potencial espiritual que tiene la sexualidad.