Coraza Pélvica en los hombres

Este fin de semana del 07 de Marzo fue el segundo módulo del Curso de Educación Sexual para Terapeutas. Nos tocaba hablar de Sexualidad Masculina.

Fue interesante que así fuera, ya que al día siguiente 08 de Marzo se celebró el día mundial de la Mujer. Podríamos decir que fue un fin de semana Yang-Yin para nosotros.

Si bien como mujer me siento solidaria con cualquier movimiento que busque reivindicar la condición femenina y exaltarla, no puedo dejar de mencionar que igualmente es necesario honrar la condición masculina y exaltar todas sus cualidades.

Y no existe el día del Hombre...

Nosotras las mujeres tenemos que ejercer la compasión hacia los hombres en muchos aspectos de su naturaleza, pero el que nos incumbe aquí es con respecto a la sexualidad.

Durante nuestra actividad de este Sábado estuvimos hablando del concepto de "Coraza Pélvica" masculina.

Esto se refiere a una tensión que se desarrolla en todo el complejo de músculos pélvicos como respuesta refleja a traumas físicos y traumas emocionales. La contractura muscular busca impedir que el dolor se irradie, dejándolo así aislado en la zona, lo cual es una respuesta fisiológica pero sostenida en el tiempo se convierte en una respuesta patológica.

Entonces estamos frente a una circunstancia en la cual hay una memoria de dolor físico o dolor emocional guardada en los músculos pélvicos y esto trae como consecuencia que cuando ese hombre experimente excitación sexual, haya una limitación en la cantidad de energía sexual que puede contener su zona pélvica y que haya dificultad de que esta energía sexual circule desde esa zona pélvica hacia el resto del cuerpo.

Por esa razón es muy importante para el hombre que quiere explorar elevados niveles de placer sexual y para la pareja que lo acompaña, que se haga una revisión de la historia sexual de ese hombre de manera de detectar probables causas de "Coraza Pélvica".

Las mujeres siempre estamos enfocadas en aquello que nos ha producido un trauma sexual a nosotras, pero no pensamos casi nunca en aquello que puede producir trauma en el hombre.

Por ejemplo, la "negociación" con el sexo.

Recientemente en una actividad que realicé con mujeres estuve hablando sobre sexualidad oral, sexualidad anal, fantasías eróticas, y me llamó la atención que una de las participantes siempre intervenía diciendo "negocialo"...dando a entender que cualquier deseo sexual que pueda tener el hombre y que la mujer no desee, lo puede cumplir pero bajo una condición y con una ganancia secundaria.

Este tipo de conducta femenina crea una tensión energética en el hombre que se guarda en su cuerpo igual que en el cuerpo de la mujer se guarda una conexión sexual violenta o agresiva, y esa tensión se acumula en el tiempo.

Otro ejemplo sería la memoria de ser descubierto masturbándose, o la memoria de la primera relación sexual con una pareja en donde el acto fue torpe, doloroso o interrumpido.

El tema es complejo y es motivo de discusión larga y profunda, pero he querido llamar la atención al respecto porque pienso que son pocas las veces en que nos tomamos el tiempo de considerar cuáles son las memorias que guarda nuestra amada pareja, y que pueden estar condicionando su capacidad de conectarse con el placer.

Esta "Coraza Pélvica" para poder ser disuelta requiere un reconocimiento de esas memorias y un trabajo amoroso de masaje por parte de la pareja, de toda la musculatura sobre la zona del pubis y a nivel de las nalgas, para ir liberando tensión tal cual como se libera tensión en el cuello, los hombros o la espalda.

Las relaciones de la Nueva Tierra requieren de una actitud de respeto y honra de hombre a mujer y de mujer a hombre. Ambos tenemos defectos y ambos tenemos virtudes. Ambos tenemos capacidad de disfrutar y ambos estamos marcados por dolor con respecto a la sexualidad.

Recordemos aquello que nos afecta sexualmente y comprenderemos lo que los afecta a ellos.